lunes, 22 de agosto de 2011

Llegada e instalación

Bien, ayer por fin llegué a Horsens. El viaje fue más largo de lo esperado, la verdad. 

El sábado, con las maletas "preparadas", se nos ocurrió pesarlas (podía llevar hasta 40 kg, pero repartidas en 2 maletas de como máximo 20 cada una). Pues bien, una pesaba 13 kg, hasta allí bien, ¡pero la otra pesaba 30 kg! Así que buena tarde recolocando cosas, cambiándolas de maletas, dejando cosas en casa... Al final, 17 kg en la mochila y 24 en la maleta.

El domingo comenzó a las 7 de la mañana, levantándonos para ir al aeropuerto. El vuelo salía a las 10:10, con Norwegian, pero bueno, siempre hay que estar un par de horas antes, además, tenía que embalar la mochila grande que llevaba como maleta. A pesar de los 41 kg que llevaba, y mal repartidos, hicieron la vista gorda. El vuelo salió a la hora y la llegada fue según lo previsto a Copenague, 3 horas después. Cuando recogí el equipaje creí que moría, la mochila pesaba los 17 kg más la mochila pequeña que se puede acoplar, que serían otros 3 o 4 kg, pues eso en la espalda... Menos mal que encontré carro para llevarlas. 

Mi vuelo

Después fui a la estación de tren del aeropuerto, compré mi billete con reserva incluida. Pues bien, el tren para el cual había comprado el billete a las 14:30 venía con retraso y nunca apareció. Al final cogí otro tren, sobre las 15:45, y con el llegué a Horsens, pero una vez sentado me tuve que cambiar de asiento, porque llegaron otros con reserva de ese asiento (mi reserva ya no valía). Más o menos 3 horas después estaba en Horsens. 

Ahora tocaba ir a buscar la llave, cogí un taxi con un chico que tenía que ir al mismo sitio que yo y fuimos a buscar las llaves. Una vez allí doy mi nombre y ¡sorpresa! mis llaves no estaban, así que después de esperar un rato me dijeron que me fuera a la residencia, me dieron el número de habitación y que me esperara allí que llegarían con las llaves. 2 minutos después de llegar vinieron ya con la llave. Y en la habitación estaba mi compañero, un valenciano llamado Adrià.

Y esta mañana ha tocado ir a las presentaciones a las 8:30. Un recorrido por la universidad, la compra de las pulseritas para la RUS week (es una semana donde hacemos juegos, deportes, para conocer a los erasmus) y por la tarde juegos. Había varios, como pasar en fila un vaso de agua llenando el de atrás, pasar a las personas como una ola, vestir a una persona con la máxima ropa posible, pasar un plátano entre las piernas y alguno más había.

De momento esto es todo. A ver si voy haciendo fotos y las voy colgando.

1 comentario:

  1. Poco a poco verás que te encuentras como en casa. Disfruta de la experiencia y aprende mucho del idioma y de la gente con la que te relaciones. Ese es el objetivo principal.
    un beso
    Ana

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